Por Rosario Anzola

Conocí a Fredy Reyna cuando era una adolescente, en un curso donde nos convenció de que el cuatro solo se podía tocar si los dedos aprendían a encontrar la magia escondida entre sus cuerdas. Luego de ese encuentro Fredy se convirtió en uno de mis ídolos.

Mucho tiempo después, cuando dirigí una importante fundación cultural, tuve el honor de montar una exposición sobre su obra (Fredy Reyna a los cuatro vientos), así como también tuve la dicha de registrar en la sede de la Fundación Fredy Reyna sus invalorables colecciones y recuerdos, gracias a la generosidad y entusiasmo de su familia.  Esa casa, donde vivieron por años, resguarda un patrimonio monumental que algún día -ojalá no muy lejano- conformará el Gran Museo Fredy Reyna.

Sus hijos tienen acuciosamente catalogado cada objeto y nos costó muchísimo concretar el concepto expositivo entre las miles de piezas allí custodiadas. Apelamos a la rosa de los vientos como imagen para simbolizar la libertad creativa de un coleccionista que fue músico, ejecutante, compositor, arreglista, titiritero, juguetero, luthier, pedagogo, inventor, poeta, soñador, enamorado eterno de Lolita y compañero de aventuras de sus hijos.

Existe un gen poderosamente creativo en la familia Reyna. Federico es diseñador, músico y ejecutante del cuatro, al igual que Maurice, quien además destaca como excelente compositor.  Tatiana es una “bailaora” inigualable, cuya fama trasciende las fronteras y Anita es una diseñadora gráfica de primer orden.  Es un cuarteto genial y talentoso que da cuenta de la atmósfera libre y amorosa que conformaron Fredy y Lolita.

Fredy hizo de su vida una creación permanente. Inventó una afinación para el cuatro con la prima aguda (una octava superior) y elevó el instrumento a niveles musicales insospechados. Transmitió su pasión por el instrumento a sus alumnos, a quienes dedicaba horas y horas hasta amalgamarlos con devoción las cuerdas. Escudriñó a fondo la historia y evolución de  los cordófonos y dejó una sólida obra de investigación, indispensable para el estudio de los etnomusicólogos.

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